UGT y CCOO no dejan de sorprendernos.La semana pasada leíamos que en estos sindicatos se habían subido el sueldo y las dietas en plena crisis, y ayer El Mundo informaba en su portada de que UGTy CCOO cobran por ERE como el que cobra por horas.
Al parecer, los dos máximos exponentes del sindicalismo de clase llevan una década percibiendo una comisión de la Junta de Andalucía por cada ERE que ésta financia. Entre 2001 y 2010, cada uno de ellos habría ingresado entre 3,5 y 7 millones de euros anuales a través de esta siniestra forma de financiación. Como ejemplo, basta referirnos al diario El Mundo que ayer informaba de que “cada uno de estos sindicatos ingresarán al menos 1,2 millones de euros por el cierre de la multinacional Delphi”.
Que un sindicato, organización cuya principal misión es defender los derechos de los trabajadores, ingrese dinero cada vez que se despide a uno de esos trabajadores a los que supuestamente representa es otro síntoma de que el modelo del sindicalismo de clase no funciona: ¿Cómo van a defender el empleo unos sindicatos que se enriquecen cada vez que se destruye empleo?
La actualidad nos da la razón casi semanalmente: en FASGA estamos convencidos de que el presente y el futuro del sindicalismo pasan por un modelo profesional e independiente, que vele por los intereses de los trabajadores, que no dependa de las subvenciones públicas y los favores políticos y que, por supuesto, no se aproveche de la situación de crisis que atravesamos para enriquecerse.